Costa Rica celebra el Día Nacional de la Vida Silvestre el 31 de julio con la intención de concienciar sobre el valor que la flora y la fauna tienen y contribuir a la lucha por su conservación.

Según el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC) la vida silvestre está compuesta por “la fauna continental e insular que vive en condiciones naturales, temporales o permanentes, en el territorio nacional y la flora que vive en condiciones naturales en el país”. Bajo esta definición, y según los datos del SINAC, Costa Rica cuenta con más de 8500 especies de plantas, 220 especies de reptiles, 160 especies de anfibios, 205 especies de mamíferos y 850 especies de aves.

Sin embargo, existen más de 200 especies de fauna con poblaciones reducidas o amenazadas. A su vez, se tienen registradas 40 especies con poblaciones en peligro de extinción. Especies como la lapa roja, la lapa verde y el oso hormiguero gigante son algunas de ellas en las que su población se encuentra en amenaza de extinción.

Desde el 2014 el SINAC emitió una guía ambiental para la protección de la flora y la fauna del país, en la que se instruyen aspectos legales, técnicos y científicos para promover su conservación.

Tres de las acciones que impulsan estos esfuerzos son un programa para incentivar la creación de Refugios Privados de Vida Silvestre, un decreto que busca proteger el almendro de montaña, que funciona como alimento para la lapa verde, y estudios de reintroducción al hábitat natural de especies como la lapa roja.

La cantidad de especies de flora y fauna que alberga Costa Rica constituye cerca del 5% de la biodiversidad mundial.